Supongo que estaré aburrido y que dirás "otra vez está escribiendo el pesado este", pero a día de hoy terminé un poco más pronto de lo normal mi lección de Zoología, Crustáceos, de modo que me gustaría seguir escribiendo mis vivencias y otras anécdotas; así que, con tu permiso, procederé a la escritura.

Esto ocurrió el Miércoles día 5 de Junio. Era un día pre-semana de exámenes como otro cualquiera. Por la mañana, me levanté sobre las 10:30, me lavé la cara, encendí el ordenador y cargué mis diapositivas con uno de mis grupos de Artrópodos preferidos, Quelicerados: arañas, escorpiones, pseudoescorpiones, solífugos, opiliones, cangrejos cacerola, picnogónidos y ácaros, ni más ni menos. Como acostumbro a hacer, estudio la primera mitad por la mañana y el resto durante la tarde. Almuerzo, minutos después charlo por msn (deleitándome con la presencia de mi dulce Alexa >////<), pruebo un programita para componer MIDIs y, como no es mi intención la de hacer publicidad, me tomaré la molestia de no decir el nombre y pasar al nudo de la historia.

Preparo mi mochila, mi riñonera y en cuestión de media hora llego a la facultad. Eran las 19:00 y como acostumbrábamos, teníamos la clase de Genética. Era una situación peliaguda, esta semana teníamos dos series de problemas puntuales (lo que viene a ser un trabajo en grupo, entrega de problemas y "miniexámenes orales" de aquellas tareas), una minievaluación (aka, control rompe-ortos) y, por si fuera poco, toda una ristra de exámenes unos días después.

El kit de la cuestión es que nos tocaba corregir la última serie de problemas y, el último ejercicio solicitaba la redacción de una redacción de 200 palabras sobre una investigación relacionada con temas de Genómica, Terapia Génica, Vectores retrovíricos y demás paranoias de Genética (relacionado a materias de los temas 7-12). Como buen estudiante, aunque tuviera otras materias que estudiar, me decidí a hacer un artículo en condiciones: la labor fue un cachondeo.

Días antes de la entrega, durante el fin de semana, me tomé la molestia de buscar sobre una terapia alternativa para pacientes con la Anemia de Fanconi, redacté el texto con exactamente 200 palabras y, en adición, pasé enlaces de esto a mis compañeros. Su actitud era de chiste, ninguno firmó la hoja para defender la tarea en público, no tenían intenciones de rellenar el ejercicio y no se tomaron la molestia de revisar lo que les pasé: peor para ellos.

¿Resultado? Salí yo solo, frente a un grupo de más de 100 personas, para realizar una exposición. Además de no recibir ninguna pega por parte de la profesora, de recibir buenos comentarios y un fuerte aplauso, logré el mejor resultado de aquellos últimos 25 minutos. Hablamos de un ejercicio que se hace en grupo, y de exposiciones en las que más de una vez se intervenía para ayudar a los compañeros. Además de conseguir hacer la exposición más impecable, pude superar a grupos enteros de personas realizando una explicación completa y al detalle.

Fue una gran experiencia, un subidón de moral, una forma de demostrar mis capacidades, y lo mejor de todo: fui el único que firmé, me gané el punto del ejercicio. ¿Sobre mis compañeros? Ellos se lo pierden...

PD: No les guardo rencor ni estoy molesto, sólo que fue una estupidez perder un punto que estaba ganado (yo no iba a permitirlo de ninguna de las maneras). Al menos pasaron el ejercicio a la hoja, cosa que agradezco.