Es algo muy triste lamentablemente... sobre todo porque no es algo que nos haya tomado por sorpresa, es una problemática que lleva en pié bastante tiempo.
Las personas somos mediocres y nos limitamos a los paradigmas, que evolucionan a conveniencia de unos pocos y amoldan el pensamiento de los demás.
Habría que pensar por ejemplo; en lo abusivos que pueden llegar a ser algunos hasta el punto de comerciar con un recurso que nos proporciona la naturaleza, como el agua.